miércoles, 23 de agosto de 2023

Análisis sobre la alianza opositora al Gobierno de Abinader y al PRM

 Autor: Politólogo Luis Columna Solano- Máster En Gobierno y Administración Pública.

Fuentes noticiosas fueron testigos de que días atrás, el ingeniero Miguel Vargas Maldonado, actualmente Presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) hizo público que no estaba mediando en lo qué finamente concluyó más qué haciendo, anunciando al país a través de una rueda de prensa este lunes 21 de agosto 2023. La presentación de la gran alianza de oposición política al actual gobierno del Presidente Luis Abinader, compuesta por los tres partidos mayoritarios: De la Liberación Dominicana (PLD), Fuerza del Pueblo (FP) y  Revolucionario Dominicano (PRD)

Algunos en sentido común quizás no llegaron a comprender aquella táctica dilatoria de negarlo todo. El objetivo era creer más expectativas en la opinión pública sobre el particular y por vía de consecuencias, igualmente confundir al gobierno y al Partido oficial, quienes son conscientes del grave peligro que esta coalición significa para la posible reelección del actual mandatario.

Fue exactamente la misma estrategia usada por el jefe del Estado respecto a su decisión de optar o no, por un segundo y definitivo mandato constitucional  de acuerdo a la Constitución  del 2015 que restableció la reelección presidencial consecutiva en dos períodos y nunca jamás.  El país escuchó al Presidente decir que su esposa y Primera Dama Doña Raquel y dos de sus tres hijas, estaban en contra de que buscara continuar, sin embargo el país le creyó igualito que a Miguelito cuando lo negó todo. Cero o nada. 

En fin, la cuestión es que el presidente ya dijo que va y Miguel anunció la creación del bloque opositor. En este contexto toca descifrar los posibles escenarios. 

En primer lugar, es preciso destacar que cuando los partidos están en ejercicio del poder, como plataforma y soporte político del gobierno, los mismos son evaluados en tres dimensiones, dado el sistema de gobierno presidencialista. En cristiano quiero decir que el Presidente Luis Abinader es medido en primer lugar como Jefe del Estado o presidente de la República, luego como jefe del gobierno y a parte, el PRM. Son tres estadísticas distintas. 

En tanto los partidos  cuando están en la oposición,  es totalmente distinto, pues son medidos por el nivel de su estructura orgánica y luego,  por el liderazgo. Aquí en este punto, es donde el lector debe observar qué   el resultado de las elecciones de medio término en febrero 2024 ( elecciones municipales y congresuales), no es cierto que será un aviso de lo que posiblemente pasará en mayo de ese mismo año en la elecciones presidenciales y vice presidenciales.

En nuestra opinión el PRD persigue mantener su reconocimiento de 
Partido mayoritario  y salvar las siglas del otrora glorioso PRD de Peña Gómez y de paso en un posible triunfo electoral, formal parte de un gobierno compartido; en tanto la FP para las municipales y congresuales, no creo que busque obtener mayor resultado que el PLD. Entiendo que le bastaría consolidarse con un aceptable resultado institucional; sin embargo el PLD, siendo de los tres,  el partido con mayor estructura orgánica y toda vez, detenida la hemorragia de dirigentes de todos los niveles hacia la Fuerza del Pueblo, más que pensar en un triunfo en las presidenciales, buscaría mantener su actual posicionamiento institucional en Ayuntamientos y el Congreso Nacional.

El objetivo que buscarán para febrero tanto gobierno como oposición, es mostrar músculos ante un electorado, que observa con mucho cuidado el comportamiento de los partidos, del gobierno y del liderazgo nacional. 

Dicho esto, el presidente Abinader tiene una única oportunidad de conseguir su anhelada reelección y  es, ganar en primera vuelta electoral en mayo 2024. Tiene la ventaja de estar en el poder, pero el   handicap de que su partido es igualmente pequeño y con una estructura piramidal carente de base social. Si no logra cruzar la meta el 20 mayo, mucho me tema que se repetirá el escenario electoral de 1996, a diferencia de qué los dos aspirantes que clasificaron para la segunda vuelva, eran ambos opositores, pero uno gozaba del apoyo del Presidente saliente. Para los lectores más jóvenes, aquellos protagonistas fueron los doctores: Joaquin Balaguer Ricardo ( fallecido en 2002) José Francisco Peña Gómez (fallecido en 1998) y Leonel Fernández Reina, actual líder de la Fuerza del Pueblo. 

El punto más caliente del acuerdo del bloque opositor, lo constituye el compromiso de que aquel candidato presidencial que logre detener la reelección en primera vuelta, recibirá  el apoyo de aquellos que no clasificaron para derrotar en una eventual segunda vuelta al Presidente Luis Abinader. 

Entiendo que independientemente del
resultado obtenido por los partidos políticos en las elecciones de febrero, para mayo  y junio 2024 sólo hay dos escenarios posibles y todos sabemos cuáles son. 

Prometo otro articulo  con mayores

martes, 8 de agosto de 2023

Temor a la alianza FP, PLD, PRD y demás aliados.

 

Temor a la coalición opositora FP, PLD, PRD y demás aliados. 

 

El Presidente de la República Luis Rodolfo Abinader Corona y el presidente del Partido Revolucionario Moderno (PRM) y ministro Administrativo de la Presidencia José Ignacio  Paliza, son consciente de que se finalmente se concretiza una alianza electoral de la familia bochista  Partido de la Liberación Dominicana y la Fuerza del Pueblo (PLD y FP), mas el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) y demás partidos emergentes, las posibilidades reales  de una reelección, es casi nula.

 

Una de las razones por lo qué  el Jefe del Estado podría sorprender al país, en anunciar su no presentación a la continuidad consecutiva (reelección), de acuerdo a su derecho constitucional de aspirar a dos periodos consecutivos. Abinader ya no es un novato en política. Se ha convertido en todo un estadista, pero sobre todo, en un político con los pies sobre la tierra  y que sebe que aunque en política, dos y dos no son cuatro, tres si son más que uno.  Partiendo de ahí, el Presidente no correría el riesgo de caer derrotado o humillado en un escenario de segunda vuelta donde no tendría la minina posibilidad de ganar.

 

Hasta el momento el sistema político dominicano consta de una partidocracia  compuesta por más de 27 partidos políticos reconocidos por la Junta Central Electoral, siendo apenas 4 de ellos considerados partido mayoritarios, al haber alcanzado el 5% o más del total de los votos validos emitidos en el último certamen electoral en mayo del 2020, de acuerdo a la Ley 33-18 sobre Movimientos, Agrupaciones y Partidos Políticos.  Sucede que 3 de los 4, están conformando una alianza opositora, la cual el gobierno y el partido oficial califican de acto de debilidad y hasta lo minimizan.

 

Las autoridades del PRM en nuestra opinión deben estar bastante preocupadas, pues como escribió una colega, "los bochistas no han necesitado 14 años de oposición para entender las consecuencias de la soledad del poder". En tal sentido, los ex presidentes: Leonel Fernández Reina y  Danilo Medina Sánchez, según el radar político, han comprendido que a pesar de sus diferencias, han de pensar en el país, en las bases de sus respectivos partidos y aliados y por vía de consecuencia, autorizaron sendas comisiones negociadoras, bajo la coordinación del presidente del Partido Revolucionario Dominicano, Miguel Vargas Maldonado.

 

A todo esto se suma la lucha interna en el PRM por el liderazgo y la candidatura presidencial. Allí aunque lo disimulan, hay problemas serios. No es cierto que haya consenso absoluto en la figura del presidente Abinader. Todo eso a  pasar de que el gobierno está gastando cientos de millones de pesos en publicidad y pago de bocinas en los medios de comunicación, así como el maquillaje de encuestas.

 

El PRM es un partido pequeño, sin base social en el pueblo. El hecho de que sus siglas están en ejercicio del poder, fue la consecuencia la división del PLD en el poder y el nacimiento de la Fuerza del Pueblo. Abinader ganó en primera vuelta con más del 8% de votos prestados de simpatizantes del líder de la Fuerza del Pueblo, sin embargo para el año 2024, el escenario electoral será diferente, porque Leonel ahora es tendencia electoral y alternativa de poder como líder opositor, lo que significa que ha reagrupado a su alrededor, todas sus fuerzas.

 

Opositores a la Alianza FP-PLD.

 

Dicho esto, hemos de tratar brevemente la posición negativa a esta alianza de parte del Partido Fuerza Nacional Progresista (FNP), liderada por el Doctor Vinicio Castillo, (Vincho) y capitaneada por sus tres hijos, siendo el más aguerrido, Vinicio Castillo Semán, mejor conocido como Vinicito.  Hay que destacar que la FNP ha sido un aliado por varias décadas de Leonel Fernández en todos sus gobiernos. 

 

El alto dirigente y ex diputado por la capital @VinicioSenador ha manifestó que esta alianza sería un suicidio moral y político para la Fuerza del Pueblo y su líder, Leonel Fernández, en el entendido de qué rompió con el PLD por cuestiones  ideológica entre otros motivos. En tal sentido Vinicito ha emitido una cantidad de twist donde denota esta alianza. Al respecto soy de opinión que este planteamiento es equivocado, ilógico y sin sentido sobre la base de la estrategia y la concertación de alianza en la lucha por el poder en democracia.